Hostales en Olivenza

Descripción

A veinticuatro kilómetros de Badajoz se nos presenta esta pintoresca tierra repleta de reminiscencias lusas, puesto que durante años. estuvo bajo el dominio de nuestro país vecino, lo que supuso la incorporación a la región extre meña de costumbres, tradiciones y gran número de construcciones artísticas ajenas al desarrollo general de los pueblos españoles.

Historia

El origen de esta ciudad, fundada por la Orden de los Templarios. data del siglo XIII, a finales del cual fue cedida a Portugal por el Tratado de Alcañices. A partir de este momento, la localidad comenzó a experimentar un inmenso auge gracias a que los sucesivos monarcas portugue ses mostraron un gran interés por la zona. Entre ellos destaca indudablemente el rey Manuel I, con cuyo nombre se bautizó un peculiar estilo arquitectónico luso, el manuelino, enmarcado entre el gótico tardío y el incipiente renacimiento, que puede ser muy bien apreciado en toda su belleza en los bonitos edificios diseminados por toda Olivenza. Ya en el siglo XVII la prosperidad de la ciudad que ejercía una importante función como zona aduanera, le reportaba grandes beneficios. aunque hay que decir que ésta se vio considerablemente mermada a causa de las guerras fronterizas, tras las cuales la villa pasó a pertenecer de nuevo al territorio español. Se trató, no obstante, de un corto periodo de tiempo del que apenas existen vestigios destacables. En 1668 la ciudad pasaría de nuevo a formar parte de Portugal, dominio que duró hasta el año 1801, cuando en la llamada Guerra de las Naranjas el valido Godoy la devolvió definitivamente a España. Como decíamos, lo más llamativo del lugar radica en sus tradiciones de influencia lusa, únicas en España. las cuales quedan patentes, por ejemplo, en las originales fiestas populares, como es el caso de las llamadas (muñecas de San Juan>, en junio.

Visitas

En cuanto a su arquitectura, si observamos dete nidamente cada calle, cada construcción, pode mos apreciar las grandes diferencias que existen con las demás poblaciones extremeñas. Para empezar, en la plaza de la Constitución se halla la sede del Ayuntamiento, antes palacio de los duques de Cadaval, donde una bellísima portada de estilo manuelino, sobria y equilibrada, atrae la atención sobre cualquier otro elemento. Muy cerca, y realizada en la misma época (siglo XVI), aparece la iglesia de Santa Magdalena, considerada como uno de los mejores eiemplos monumentales del estilo manuelino. En este templo, construido a base de sillares y mampostería, se encuentra enterrado Enrique de Coimbra, impulsor de la obra. Son destacables, además, algunos interesantes retablos así como las grandiosas bóvedas y las columnas torsas de su interior. Este templo se abre al exterior mediante una magnífica portada donde figura el escudo de los franciscanos. la monumental plaza de Santa María es también conocida por la iglesia que la ocupa: Santa María del Castillo. Apenas quedan actualmente restos del estilo renacentista tardío en el que se concibió, pero a pesar de ello aún continúa siendo uno de los más bellos monumentos del lugar, no tanto por su exterior auste ro carente de grandes ornamentos, como por su suntuoso interior, compuesto por tres espléndidas naves y cuya capilla mayor alberga un original retablo barroco. En la capilla del evange lio podemos contemplar un interesante árbol genealógico de la Virgen María. El castillo del siglo XIV que da nombre a la igle sia por su proximidad a ésta, alberga el Museo Municipal González-Santana que posee interesante colección etnológica. Además. esta edificación de carácter defensivo toma altura por medio de su gran torre del Homenaie. de casi cuarenta metros de altitud, a la cual flanquean otros toneones de menor envergadura. antigua ciudadela, todavía impregnada de un cierto encanto medieval, posee aún las puertas del Alconchal y la de los Angeles, las únicas de las cuatro iniciales que hubo. Enfrente está la casa de la Misericordia. cuya azuleieria portuguesa. donde se representan escenas bíbilicas. constituye una auténtica delicia. No se puede hablar de Olivenza sin citar e paseo denominado Largo de San Francisco con a los lados y poblado de de Palacios representativas del lugar. La sobresaliente de éstas es la de 10s M caracterizada por la serenidad del estilo neocla sicista en que fue construida. En esta calle y en muchas otras cercanas encontrar además, lugares donde se las típicas delicias gastronómicas de la que funden en un mismo plato las tradiciones de los dos paises a los que Olivenza ha pertenecido a lo largo de su historia.

Alrededores

A tan solo 14 minutos en coche de Olivenza, encontramos el embalse de Piedra Aguda, donde podrán disfrutar de un paseo agradable entre la naturaleza.

Compras

Entre la maraña de calles de este municipio encontrarán oferta de productos típicos de la zona caracterizados por su origen natural, como son el queso, los embutidos, el aceite de oliva y

Fiestas

Se pueden destacar las originales fiestas de Junio llamadas muñecas de San Juan, en las que se celebran las tradiciones de influencia lusa,únicas en España. En ellas los oliventinos colocan muñecas con un marcado carácter satírico y crítico en las puertas de sus hogares. El domingo de Lázaro, que precede al de Ramos, tiene lugar tras la celebración de los Carnavales o (entrudu, que tienen importantes elementos exclusivos dentro de nuestro país. Después llega una peculiar Semana Santa con procesiones de gran interés cultural y turístico.

Gastronomía

Dentro de las especialidades de su repostería, de gran tradición en la zona, destaca la elaboración de la llamda técula o mécula, torta realizada con tocino y almendras, entre algunos otros ingredientes, donde se combinan la influencia de la cocina portuguesa y las tradiciones árabes.Otros dulces artesanales propios de la zona son las llamadas asubías y el piñonate.